Todo lo que deben saber las empresas sobre la nueva normativa
La cuenta atrás ha comenzado. A partir de 2025, el control horario digital dejará de ser una recomendación y pasará a ser una obligación legal para todas las empresas con empleados. La nueva normativa de control horario busca garantizar la transparencia, prevenir abusos laborales y modernizar el sistema de registro de jornada que lleva años siendo motivo de sanciones e inspecciones.
¿Cuándo entra en vigor la obligación del control horario digital?
Aunque el registro de jornada laboral ya es obligatorio desde el Real Decreto-ley 8/2019, la reforma de 2025 introduce una novedad clave: el registro deberá realizarse mediante sistemas digitales que aseguren trazabilidad, integridad y acceso inmediato tanto para el trabajador como para la Inspección de Trabajo.
La nueva obligación entra en vigor el 1 de enero de 2025, con un periodo de adaptación de tres meses para empresas que aún usen métodos manuales o en papel.
Esto significa que, a partir del 1 de abril de 2025, cualquier empresa que no cuente con un sistema digital de control horario podrá enfrentarse a multas de hasta 7.500 euros por incumplimiento, según lo previsto en la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social (LISOS).
Qué exige exactamente la ley de control horario digital
El nuevo registro de jornada por ley debe cumplir con una serie de requisitos técnicos y legales:
- Registrar hora exacta de entrada y salida de cada empleado.
- Garantizar la veracidad y no manipulación de los datos.
- Conservar los registros durante al menos 4 años.
- Permitir acceso inmediato a los trabajadores, sus representantes y la Inspección de Trabajo.
- Adaptarse a todos los modelos laborales, incluidos el teletrabajo y la jornada flexible.
Además, la norma establece que los sistemas basados en Excel, fichas manuales o firmas en papel ya no se considerarán válidos, al no garantizar trazabilidad ni seguridad de los datos.
A quién afecta la nueva normativa
La normativa de control horario para empresas afecta a todas las organizaciones con personal contratado, sin importar su tamaño ni sector:
- Pymes y autónomos con empleados.
- Empresas de limpieza, hostelería o comercio.
- Oficinas, teletrabajadores y equipos híbridos.
El objetivo del Gobierno es que ningún trabajador quede fuera del registro digital, y que las inspecciones laborales puedan verificar los datos en tiempo real.
¿Por qué digitalizar el control horario?
Más allá del cumplimiento normativo, el control horario digital ofrece beneficios tangibles:
- Evita errores humanos y sanciones.
- Facilita la gestión de ausencias, vacaciones y horas extra.
- Mejora la transparencia y la confianza interna.
- Permite analizar productividad y optimizar turnos.
Herramientas como OnTime simplifican este proceso, ofreciendo un sistema de fichaje digital conforme a la ley, accesible desde web y móvil, y adaptado a las necesidades reales de cada empresa.
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Conclusión control horario
El control horario digital ya no es una tendencia: es el nuevo estándar de cumplimiento y eficiencia.
Quienes se adapten antes no solo evitarán sanciones, sino que también ganarán en organización, productividad y confianza.
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